En columna de opinión en El Mercurio, Patricio Feres, partner de Yuken, señala que desde hace años en Chile existe una creciente valoración de la innovación, el ecosistema de innovación y emprendimiento es reconocido internacionalmente al igual que su capacidad de investigación, pero nuestra tasa de la misma (porcentaje de empresas que hacen innovación) se encuentra en los últimos lugares de la OCDE, logrando menos de la mitad que la de los países desarrollados; sumado a que la innovación que hacemos es de bajo impacto. Esto último se relaciona con que la naturaleza de los esfuerzos de innovación entrega una importancia muy baja a la I+D. En el Global Competitiveness Index y el Global Innovation Index se reconocen mejoras en el tiempo en los valores de distintos indicadores pero pérdida en la posición relativa respecto a otros países. Es decir, estamos avanzando pero el resto avanza más rápido que nosotros.